El Ministerio y las CCAA inician el diseño de la Estrategia de Atención y Coordinación Sociosanitaria
Publicada el 24.03.2014
Representantes del Ministerio de Sanidad, Servicios Sociales e Igualdad y de las Comunidades Autónomas se han reunido en Madrid para iniciar los trabajos de redacción de la Estrategia de Atención y Coordinación Sociosanitaria sobre la base de un proyecto del que hoy mismo se ha hecho entrega. Un texto que será el marco del acuerdo, ya que contará con las aportaciones de las partes, no sólo de las CCAA, sino también de las entidades del tercer sector y de las organizaciones sociales. El objetivo no es otro que llegar a un documento de acuerdo antes del verano, y por tal razón, se han configurado cinco grupos de trabajo en función de los cinco bloques temáticos que componen el informe del Ministerio.
Los epígrafes del texto son: Definición del perfil de las personas con necesidades de atención sociosanitaria; La regulación del catálogo de servicios sociosanitarios y dispositivos de atención; El establecimiento de un sistema común de autorización y acreditación en todo el territorio nacional, con criterios homogéneos; Instrumentos de gestión del proceso; y Un sistema de información común.
El documento del que ya disponen las Comunidades Autónomas incide, por tanto, en qué personas tienen necesidades de atención sociosanitaria, y en consecuencia, necesidad de uso del elenco de servicios y prestaciones sociales y sanitarios. Se incluyen personas con enfermedades crónicas progresivas, con enfermedades en situación terminal o enfermedades mentales, personas con discapacidad física y/o sensorial, así como con discapacidad psíquica o intelectual, personas con adicciones y personas en las que coexista una situación de dependencia. El texto deja claro que ésta no es una clasificación ni exhaustiva ni definitiva, y que habrá de completarse con información sobre las preferencias, expectativas, pautas y estilo de vida de dichas personas.
La prevención, la integralidad, la coordinación externa e interna con otros ámbitos asistenciales, la humanización de los servicios, la calidad, la atención concreta de determinadas necesidades son los principales factores que cimentarán la cartera/catálogo de servicios sociosanitarios.
Por su parte, en el diseño de un modelo de autorización y acreditación, que abarcará todo el territorio nacional, el texto del Ministerio apuesta por un modelo único ajustado a criterios comunes, pues, tal y como señala el documento, “una planificación conjunta permitirá una oferta más equitativa y eficiente de recursos y servicios”. Se elaborarán protocolos y guías clínicas conjuntas para los procesos más frecuentes de derivación y se establecerán guías compartidas de prescripción de medicamentos.
La entrada de una persona en el circuito sociosanitario procede de la presencia de una patología que requiere una atención específica. La confluencia de factores genera una necesidad de actuación coordinada para facilitar la atención correcta y completa al paciente.
Tal y como consta en el acuerdo marco del Ministerio de Sanidad, Servicios Sociales e Igualdad, la derivación del paciente a los recursos asistenciales puede activarse tanto desde el hospital de agudos como desde la atención primaria o los equipos domiciliarios, y una vez definida la ubicación, los profesionales del nivel de destino se convierten en responsables del caso y adoptarán las decisiones de forma autónoma dentro del circuito sociosanitario. En este sentido, se antoja “esencial” que se produzca “una adecuada transmisión de la información de un nivel a otro”, por lo que es importante que exista intercambio de información básica en las esferas clínica, funcional, social y psicológica.
Tan esencial como el recorrido de información entre niveles asistenciales es el intercambio entre centros o servicios, de forma que el Ministerio y las CCAA crearán un sistema unificado de información y atención al usuario sociosanitario para “garantizar el acceso a los servicios en condiciones de igualdad, y en una red coordinada”. Es ésta una de “las principales medidas a tomar”, al igual que el estudio del tipo de infraestructuras existentes, sanitarias y sociales, que deberían funcionar en dicha red. El objetivo no es otro que permitir el registro, el seguimiento y la evaluación de todo el proceso de atención.
Una vez entregado el acuerdo marco a las CCAA, éstas abrirán un proceso de estudio y alegaciones para obtener un documento de consenso. Se abrirá el proceso a los agentes sociales para que culmine con el visto bueno de los Consejos Interterritoriales de Salud y de Servicios Sociales y Dependencia.
FUENTE: balancedeladependencia.com